El sonido de la ausencia
Otaku es la novela de Paula Brecciaroli donde nos muestra la vida de Gastón a partir de su cumpleaños número 40.
Gastón es Otaku, acaso el primer representante de una cultura que llegó con fervor a Buenos Aires, empujado por la globalización de este postmodernismo tardío que pone en vilo a toda una cultura regida por las falencias del mundo occidental, que entiende al otro y lo percibe de manera peyorativa.
De igual manera en que lo hace Kandinsky cuando analiza la física del color, encontraremos en la novela el tono correspondiente a los estados de ánimo del protagonista, a ese estado de ánimo que solo puede explicarse a través de la sensación de ausencia que el color negro trae consigo. Y será la ausencia misma de Gastón, quién intentará, desde su fuero interno, comprender cómo es que el pasado, junto a sus emociones presentes, emergen desde la oscuridad total de su cuarto en un departamento citadino donde se gana la vida ayudando a su padre plomero.
La autora muestra, con una prosa ágil y ese ya clásico sello Paisano de prolijidad absoluta, cómo la representación exterior nos permite comprender el mundo a través de nuestros sentidos para crear emociones o colores que nos llevarán hacia nuevos estados sensoriales. Hacia nuevas obsesiones. Es así que Gastón, al verse implicado de manera indirecta sobre un conflicto, despertará su necesidad obsesiva de transgresión para volver a ser aquello que brilló fuerte en un pasado.
La unión familiar, es decir, el reencuentro con su madre, que si bien lo acepta de mala gana, servirá para acercarse a su hermana, una vez que el padre le muestre que realmente está solo a través de su nuevo estado de felicidad.
La novela se construye a través de binomios dicotómicos que harán oscilar al personaje dentro de una constante discordancia entre la cultura que siente propia y la edad que vive.
“Estos pibes se creen Otakus”, dice Gastón y en aquélla reflexión ensimismada encontramos la fuerza necesaria para hacer que los colores, gracias al gusto de la emoción, transmuten hacia otros tonos, inclinándose hacia ese amarillo fuerte, qué expande y pide a gritos moverse de aquí para allá.
Gastón entiende sus sentimientos y percibe su realidad de la misma manera que lo hace con los caños que arregla. Con las tuberías que destapa. Siempre guiado por la urgencia. Y de esa manera se deslizará la certeza de que es imposible reconstruir un pasado más que en las emociones venideras, en la felicidad futura que propone un presente lleno de ausencias.
Título: Otaku
Autor: Paula Brecciaroli
Páginas: 84
Editorial: Paisanita Editora
Año: 2015